El 6 de diciembre de 1978, los bercianos, como todos los demás españoles, acudieron a las urnas para votar en referéndum a una sola pregunta: '¿Aprueba el proyecto de Constitución'? El 87,78% de los votantes dijeron sí en todo el país. El porcentaje fue mayor en la provincia de León, de 408.595 electores ejercieron su derecho 267.355 y 141.240 se abstuvieron. El 89,1% de los votantes apoyaron el proyecto. Un 6% la rechazó en la que entonces era la provincia más poblada de la Castilla y León. En 1978 la provincia de León era la más poblada de la Comunidad. Tenía 533.720 habitantes, casi 13.000 más de los que tiene actualmente Valladolid.

Portada de diarios nacionales aquella jornada
Habría que esperar hasta 2005 para que los bercianos se pronunciaran sobre otra Constitución, en ese caso la europea, en febrero de dicho año. Ya con datos del partido judicial de Ponferrada-Bierzo, la aceptación en ese caso fue similar a la española en la provincia en 1978, con un 86,8% de 'Sí' (20.941 votos) frente a un 8.3% de 'No'. La abstención en esta superó el 54% (29.395 personas con derecho a voto, no lo ejercieron):
Las portadas de todos los periódicos nacionales anunciaban el 7 de diciembre la aprobación de la norma señalando también el gran índice de abstención. Comenzaba así una nueva etapa en la historia del país y desde el primer momento surgieron comentarios que ponían en entredicho la legalidad del recuento apuntando a ciertas irregularidades en provincias como la vecina Ourense.
«Orense, la provincia española con mayor índice de inhibición (59,46 %)»
No obstante, los partidos mayoritarios, incluido el PCE, apoyaron de forma unánime el proceso convirtiéndose así en 'los padres de la Constitución', los autores del consenso, renunciando a propósitos más partidistass para conseguir un fin más grande. Las voces para solicitar una revisión de la Constitución no son nuevas pero hoy se escuchan más alto que nunca, para un texto que nació con el gran hito de no dejar a ninguno de los bloques políticos del país totalmente satisfechos.
Sacrosanta e inamovible para unos y desfasada para otros, la mayoría conviene en la necesidad de abrir un debate para actualizar una norma que este miércoles cumple 39 años.
Menos del 40% de la población española que tiene actualmente derecho a voto pudo participar entonces
Por eso, 45 años después, dos generaciones de bercianos después, ¿cuál es la opinión respecto a su vigencia o reforma? Te dejamos una encuesta: