Así, el equipo de Gobierno dirigido por el Popular Adolfo Canedo, logra vincular a los vecinos en su idea de rehusar la opción de que el Ayuntamiento tuviese que solicitar un nuevo crédito para hacer frente a las devoluciones de subvenciones concedidas al Ayuntamiento el pasado mandato por distintos ministerios para las obras del Museo Arqueológico, el Centro de Participación Ciudadana y el Recinto Ferial y Museo del Vino. Subvenciones que no se justificaron documentalmente ante el Gobierno.
Así las cosas, la opción de la que informarán al Ministerio de Hacienda pasa por renunciar a cerca de 3 millones de euros de los tributos del Estado que corresponderían al Ayuntamiento. Ello limitaría, eso sí, la capacidad de inversiones del consistorio a niveles muy considerables.
La financiación por el ICO, según informó el equipo de Gobierno en las asambleas que se cerraron el viernes, hubieran implicado irremediablemente la subida de impuestos de IBI e IVTM y el resto de tasas hasta cubrir el 100% del coste. Estas subidas de impuestos estaban cuantificadas en unos 600.000,00 euros al año.