
Esta ubicación social y educativa ubicada en la Avenida del Reino de León ha abierto sus puertas este viernes a varias asociaciones con fines sociales de Ponferrada con el objetivo de recoger todos aquellos materiales que ya no servirán para la nueva etapa del edificio, y que sí podrán seguir teniendo un uso. InfoBierzo acompañó a la ONG, Corazones Unidos, a recoger parte de la historia solidaria del municipio en las últimas décadas. Las emociones por la labor realizada y lo que queda atrás, inundó a los responsables de la Organización mientras remolcaban los bártulos. Además, otras asociaciones como Promoción Gitana de Ponferrad también ha acudido para recoger y reutilizar materiales.
Así, libros, pupitres, literas, sillas, mesas, y demás mobiliario ya está en proceso de desalojo para que la infraestructura quede libre de mobiliario y dar paso al inicio de la reforma que más tarde dará lugar a un complejo residencial universitario destinado a estudiantes de las carreras ofertadas por la Universidad de León en el Campus de Ponferrada.

El futuro del edificio como Residencia de Estudiantes
El futuro renovado edificio que albergará el Colegio Mayor universitario cuenta con 2 plantas, además del sótano y la planta baja. El sótano cuenta con 5 estancias: el almacén para la ropa cama, la lavandería, el gimnasio, los cuartos técnicos y el aparcamiento para bicicletas. Siguiendo con la planta baja, la que más estancias alberga: sala de juegos, sala de estar, sala de informática, salón de actos, comedor, zona de relax, cocina, despensa, aseos, secretaría, dirección, sala de juntas y apartamento de dirección. La primera y segunda planta ya estarán principalmente ocupadas por las habitaciones aunque también habrá un cuarto de la limpieza y un vestuario, además de los aseos comunes, respectivamente.
Cabe recordar que el presupuesto finalmente ha sido cercano a los 6 millones, una cifra cuyo coste se ha disparado desde que se visitó el edificio en 2017. El proyecto ha sido replanteado dos veces y «está suponiendo un gran esfuerzo ya que la Junta no ha intervenido y lo cubre solo la ULE» como apuntaba el propio rector. El proyecto previo al proyecto final se ha mejorado el acceso a la residencia y se ha mejorado la cubierta por una cuestión de ahorro energético. «El proyecto final para mi es muy bueno, es una pena que no tenga 30 plazas más» ha afirmado Marín. Finalmente las plazas serán entre 60 y 70 tendrá pensión completa y podría entrar en funcionamiento en apenas un año.





