El ARU de la ‘La Puebla Norte’ supondrá una inversión en Ponferrada de más de 9 millones de euros. El Consejo de Gobierno de la Junta aprobó este jueves la declaración como Área de Regeneración Urbana del espacio que se encuentra delimitado por la Avenida de la Libertad, la Avenida Valdés, y las calles Camino de Santiago, Reino de León y Avenida de Compostilla. En concreto, una superficie de 12 hectáreas que cuenta con 1.450 viviendas.
Esta inversión traerá consigo, en palabras de la alcaldesa, Gloria Fernández Merayo, una dinamización importante de la economía de la ciudad. "Calculamos que se crearán 750 empleos en cinco años, 150 empleos directos al año".
El proyecto supondrá la rehabilitación y reurbanización de una de las zonas más antiguas y con más densidad de Ponferrada. 300 viviendas se podrán beneficiar de unas subvenciones que cubrirán casi por completo el coste de las obras. El máximo que una comunidad de vecinos deberá aportar será el 13% del total presupuestado.
Merayo ha recalcado este viernes que además de los edificios se arreglarán las calles, "algo que correrá a cargo del Ayuntamiento, no de los vecinos", ha declarado.
Este proyecto, ha dicho, se enmarca dentro de un plan más ambicioso para la revitalización del centro de la ciudad. Así, Merayo ha animado a las comunidades de vecinos que quieran acceder a las ayudas a que comiencen a valorar las obras que se deberían efectuar en cada inmueble para iniciar el trámite de expedientes lo antes posible. El plazo para las solicitudes, que aún no está abierto, se comunicará debidamente.
Las obras se centrarán en las reparaciones de estructuras en mal estado, impermeabilización y aislamiento, tanto de fachadas como de cubiertas, instalación de ascensores, sistemas de calefacción y refrigeración de alta eficiencia y de ahorro energético en elementos comunes. Así, tendrán preferencia los edificios que requieran una reforma integral.
En cuanto a las calles, se llevarán a cabo la ordenación viaria de la circulación rodada creando diferentes áreas ambientales, restricción del tráfico interior, renovación de la red de abastecimiento de agua y de saneamiento, soterramiento de las instalaciones eléctricas y de comunicaciones que transcurren por fachadas y sustitución de luminarias por tecnología LED.