El consejero de Movilidad y Transformación Digital, José Luis Sanz Merino, vaticinó hoy el fin de los trabajos en la CL-631, en El Bierzo, antes de acabar el año, después de “hechos no imputables” al estado de la carretera, que es competencia de la Junta, tras el derrumbe sufrido hace ya cuatro meses. El fin, dijo, es “evitar desprendimientos futuros”, y aprovechó para lamentar las molestias a los vecinos.
En una pregunta oral formulada por el procurador de UPL-Soria Ya José Ramón García, en la que preguntaba por el balance de mejoras de la Junta en esta vía en los últimos meses, el consejero de Movilidad avanzó que “se está haciendo un exhaustivo seguimiento de las operaciones realizadas por los geólogos”, después de ser necesaria la contratación, expuso, de la asistencia técnica de un equipo de estos expertos. Por ello, será precisa una inversión de más de dos millones de euros, con el fin de iniciar la construcción del nuevo trazado.
Las obras de retirada de elementos de la vía “son de complejidad especialmente difícil” y se están retirando los 58.000 metros cúbicos caídos, “una cantidad ingente”. Aprovechó el consejero, además, para recordar que se ha licitado un contrato de 13 millones de euros para la conservación de carreteras en el oeste de León, y que recoge la CL-631.
No convenció la respuesta a José Ramón García, quien respondió que esta inversión de dos millones “se los podrían haber ahorrado con el mantenimiento adecuado durante las últimas décadas”. Al respecto, afeó la “desidia” de la actitud de la Junta, “con la diferencia de que se apresuraron a abrir un carril de esta carretera con el paso de la Vuelta a España” a primeros de este mes, “pero tras eso, “las toneladas de piedra siguen sobre la carretera”. “Si no lo hacían, la imagen de la Junta iba a quedar muy deteriorada, como así quedó, a la vista de los televidentes y de los propios ciclistas. Eso es por el estado lamentable al que nos tienen sometidos en León y el Bierzo. Los trabajos siguen lentos, con poblaciones aisladas, con grandes rodeos de casi 20 kilómetros”, resumió García.
Igualmente, se sorprendió de que la Junta haya solicitado espacios para depositar los residuos en la comarca, “varios meses después del derrumbe”, cuando empresas y entidades locales “habían ofrecido terrenos en graveras y para relleno de huecos, y que la Junta omitió”.
“Se ve que las necesidades de los vecinos y vecinas que viven allí no son suficiente razón y desde entonces las piedras y la ladera derrumbada siguen”, criticó García.
García denunció que a la Junta “los ciudadanos les importan poco” cuando les mantiene bloqueado el acceso al vial para los vecinos de los barrios de Las Eras y Puente Romano. “Deben dar solución inmediata a este corte y deben hacer un estudio de todo el vial a lo largo de su trayecto porque esta situación se puede repetir en otros puntos y no se soluciona con parches o disculpas de que no hay dinero para todos, sino que solo hay para algunos”, concluyó.
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