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El Bierzo unió su voz en Ponferrada este domingo, clamando un grito de ayuda para todos los sectores afectados por la crisis del COVID-19. La emoción se vivió a flor de piel en una manifestación que tuvo lugar desde las 12:00 horas en la Plaza del Ayuntamiento de la capital berciana.
La convocatoria no partió de ninguna asociación ni organización concreta, sino que nació de la iniciativa individual de un grupo de amigos que decidieron correr la voz en redes sociales. Su estrategia funcionó y obtuvieron el respaldo de cientos de personas presas de la indignación y el hastío; ahogadas por unas restricciones que ponen en peligro de extinción la economía de muchísimos hogares y familias.
Cientos de bercianos de distintas edades acudieron a la cita para reivindicar soluciones a los perjuicios de las medidas restrictivas en diferentes negocios, así como para reclamar respuestas ante la incertidumbre que genera la situación actual. Las autoridades cifraron la asistencia a la concentración en más de 400 personas. Entre ellas, autónomos, hosteleros, propietarios de gimnasios y centros deportivos, así como de todo tipo de negocios, familiares y clientes fieles. En definitiva, una voz que gritó al unísono un 'S.O.S.' desesperado.
Entre los momentos más emotivos de la manifestación, cabe destacar un micrófono que fue rotando entre las manos y voces de varios asistentes -tanto propietarios de negocios como ciudadanos en general-, para manifestar abiertamente su alegato en esta convulsa situación. Además, se vivieron varios aplausos colectivos con vítores, gritos y vuvuzelas.
En la manifestación se respetaron en todo momento las normas de seguridad para prevenir contagios. A pesar de la multitudinaria asistencia, primó la distancia de seguridad y las mascarillas acompañaban las pancartas con mensajes reivindicativos.
Las reclamaciones, del mismo modo que parten de distintos sectores, se dirigieron a diferentes estamentos: ayuntamientos bercianos, Junta de Castilla y León, Consejería de Sanidad, Subdelegación del Gobierno en León, Gobierno central y Ministerio de Sanidad, entre todos aquellos que puedan poner una solución o aportar ayudas para sobrellevar los efectos de las restricciones.
