Antigua placa giratoria para las locomotoras que llegaban al complejo ferroviario de la empresa Renfe a Ponferrada, y que da nombre al barrio ponferradino de La Placa
Muelle de carga de carbón en el complejo ferroviario La Placa-Ponferrada, en el barrio ponferradino de La PlacaEl antiguo complejo ferroviario de La Placa ha entrado en la Lista Roja de Patrimonio de Hispania Nostra, que recoge los monumentos o instalaciones en estado de ruina, abandono o en riesgo de desaparecer. Precisamente este último ha sido el motivo para incluir las instalaciones ferroviarias -que dan nombre al barrio ponferradino- en la Lista Roja, ya que la asociación afirma que presenta "una seria amenaza de desaparición".
El objetivo principal de Hispania Nostra con la Lista Roja es llamar la atención, tanto de la sociedad como de sus propietarios, y promover intervenciones para la recuperación de estos bienes culturales al considerarlos de alto valor histórico. La Placa se registró como bien industrial en 2010 en el Inventario de Patrimonio Industrial de la Dirección de Patrimonio de Castilla y León.
"Pese al avanzado estado de deterioro, cuenta con una alta capacidad auto-explicativa de las relaciones funcionales del transporte ferroviario, de los procesos de mantenimiento de tracción vapor, electrificación y trasvase del carbón, sobresaliendo por su escala como espacio de contemplación. A nivel histórico, el alcance de las instalaciones refleja su papel central en la política energética de la posguerra; pues ilustra, como pocos enclaves, el interés del Estado por resolver las serias carencias de carbón por las que atravesó el país", detalla Hispania Nostra.
Con La Placa en la Lista Roja, El Bierzo cuenta actualmente con 6 bienes patrimoniales en peligro de desaparición: el Poblado Minero de la Peña del Seo (Cadafresnas-Corullón), la Iglesia de Santa Lucía de Valdueza (Ponferrada), la Iglesia de San Bartolomé y Casa del Cura de Ferradillo (Priaranza), la Iglesia de San Pedro de Villarino de Manzanedo de Valdueza (Ponferrada) y el Castro de Peña del Hombre en Paradela de Muces (Priaranza).
Laciana también cuenta con un bien en la Lista, la Casona-Palacio de los Álvarez Carballo en Orallo (Villablino) y, además, el último informe remitido por Hispania Nostra el pasado año, la provincia de León encabezaba la Lista a nivel nacional con 50 bienes patrimoniales en peligro.
Ya fuera del patrimonio "en riesgo", en la Lista Verde tras su correspondiente restauración, se encuentran el Monasterio de San Pedro de Montes de Montes de Valdueza (Ponferrada), el Castillo de Sarracín de Vega de Valcarce y los Canales romanos de La Cabrera y El Bierzo.
Trampillas para la carga de carbón en vagones del antiguo complejo ferroviario La Placa-Ponferrada, en el barrio ponferradino de La Placa.
Antigua placa giratoria para las locomotoras que llegaban al complejo ferroviario de la empresa Renfe a Ponferrada, y que da nombre al barrio ponferradino de La Placa.
Bienes bercianos en peligro
El Complejo ferroviario de La Placa, una antigua estación de RENFE construida a mediados del siglo XX, acompaña en la Lista Roja al Poblado Minero de la Peña del Seo (Cadafresnas-Corullón) -último bien patrimonial en incluirse en abril de 2019-, a la Iglesia de Santa Lucía de Valdueza (Ponferrada), la Iglesia de San Bartolomé y Casa del Cura de Ferradillo (Priaranza), la Iglesia de San Pedro de Villarino de Manzanedo de Valdueza (Ponferrada) y el Castro de Peña del Hombre en Paradela de Muces (Priaranza).
Iglesia de San Bartolomé y Casa del Cura de Ferradillo 
Iglesia de San Pedro de Villarino, en Manzanedo de Valdueza (César Sánchez / ICAL)La iglesia de Santa Lucía (s. XIV-VI) se incluyó en octubre de 2014 a causa del deterioro progresivo que ha sufrido desde el abandono de la población en los años 70 a causa de un incendio, además de contar con peligro de desplomes y expolio de materiales. En cuanto a la de Ferradillo y la casa del cura adosada permanecen en la Lista Roja desde 2014, ya que la cubierta central está derruida y el interior invadido por maleza, a pesar de los intentos de los propios vecinos para rehabilitarla.
En 2014 también pasó a la Lista la iglesia de San Pedro de Villarino (siglos XIII-XIV) por su abandono. Ese mismo año los voluntarios de Promonumenta limpiaron las ruinas y apuntalaron las partes que se encontraban más deterioradas. En el Castro de la Peña del Hombre se han realizado varios trabajos y excavaciones arqueológicas, pero aún así continúa en la lista de patrimonio en peligro desde 2014.
El último en entrar a forma parte de la Lista, antes de La Placa, fue el Poblado Minero de Peña del Seo, situado en Cadafresnas (Corullón), concretamente el 29 de marzo de 2019, por encontrarse en fase de ruina y la posibilidad de perder " unos de los pocos poblados mineros y arquitectura industrial de la provincia de León".
Poblado Minero de la Peña del Seo
II Campo de Trabajo de arqueología y restauración arqueológica de la Fundación Las Médulas realizado en 2016 (César Sánchez / ICAL)Bienes restaurados en la Lista Verde
Tras su correspondiente restauración -y por tanto considerados ya sin riesgo de desaparición- Hispania Nostra mantiene en la Lista Verde el Monasterio San Pedro de Montes de Montes de Valdueza (Ponferrada) y el Castillo de Sarracín de Vega de Valcarce, así como los Canales Romanos de La Cabrera y El Bierzo.
Los canales romanos -excluidos de la consideración de Patrimonio de la Humanidad como es el caso de Las Médulas- pasaron a la sección de bienes restaurados o en restauración en tres meses gracias a las limpiezas realizadas por Promonumenta, una iniciativa que lleva realizando varios años.
El Monasterio de San Pedro de Montes (s. VII-IX y considerado Bien de Interés Cultural) se mantuvo en la lista durante casi nueve años, desde 2007, hasta su restauración y situación actual. En cuanto al Castillo de Sarracín (incluido en la Lista durante 7 años, desde 2007), las obras de restauración han logrado sacarlo de la Lista Roja.
Estado interior del Monasterio de Montes el pasado año tras su rehabilitación / InfoBierzo
Trabajos de restauración del castillo de Sarracín en Vega de Valcarce en 2017 (César Sánchez / ICAL)