Los farmacéuticos de la provincia de León se convertirán en agentes de detección y prevención de violencia de género y darán una atención inmediata y personalizada a las víctimas. Lo harán en virtud del acuerdo de colaboración firmado este lunes 2 de octubre entre la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Alicia García, y la presidenta del Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León, Raquel Martínez; por el que recibieron la formación presencial sobre las pautas que permiten detectar los signos y síntomas del maltrato, los protocolos de actuación que el farmacéutico debe seguir en estos casos y la información que debe ofrecer sobre los recursos a los que pueden acudir las víctimas.
Además de esta jornada formativa, impartida por Susana de la Torre Cano, psicóloga de la Dirección General de la Mujer de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, a la que acudieron 20 farmacéuticos de la provincia, la Consejería de Familia organizará programas de formación en materia de igualdad y violencia de género online, con el fin de formar al mayor número de profesionales farmacéuticos posible, dada la extensión de la provincia, en la que hay
146 farmacias rurales, donde la cercanía y confianza del farmacéutico con el paciente hace más accesible la concienciación. Algo que aboga el Presidente del Colegio de Farmacéuticos, Javier Herradón Muñoz, que destaca el compromiso del farmacéutico ante esta lacra social y el papel clave del farmacéutico para detectar posibles agresiones a la mujer. “En muchas ocasiones las víctimas acuden a la farmacia en busca de escucha y comprensión, confiando en la confidencialidad del profesional farmacéutico y otras veces los síntomas que presentan hacen que sea el farmacéutico quien se interese por la víctima y le ofrezca ayuda ante la situación que vive”, afirma Herradón.
Desde ahora, los farmacéuticos, disponen de un protocolo de actuación ante casos de violencia de género, en el que se describen las características psicosociales de las víctimas; como pueden ser depresión, estrés post traumático, ansiedad o miedo; indicadores físicos; como cefaleas, cervicalgias, moretones, heridas o quemaduras; y las claves de la actuación frente a la víctima; como interesarse por su estado, empatizar, hablar con la víctima lejos del agresor, no hacer nada al respecto sin consentimiento de la víctima y no juzgar, dado el frágil estado anímico en el que se encuentran las personas que sufren malos tratos. Por último, se detallan los recursos existentes dentro de la Red de atención a las víctimas, para que sean informadas.
A la sesión formativa acudieron Esperanza Vázquez Boyero, Directora General de la Mujer de la Junta de Castilla y León y Da Carmen Naveira Gómez, Gerente Territorial de Servicios Sociales.