Está demostrado que los perros crean lazos afectivos estrechos con sus humanos y los consideran como parte importante de la familia. La relación también es aplicable a la inversa, y este es sin duda el caso de la historia de amor incondicional Manuel Merillas, el corredor de trail y su inseparable perro Zar.
Sólo hace falta echar un vistazo a las redes sociales del deportista Manuel Merillas para darse cuenta del vínculo de afecto que siente por su perro Zar, un border collie que le acompaña en cada aventura y del que deja huella a través de diferentes fotos. No sólo se trata de un compañero fiel sino también de un "colega de entrenamientos de montaña" como el propio deportista explicaba en una entrevista realizada a El País.
La relación entre ambos es tan intensa que Merillas, declinaba recientemente dormir en una habitación de hotel al no permitir mascotas durante su viaje para disputar la Dolomyths Skyrun. De esta manera, realizaba un viaje de 36 horas desde León llegaba a Canazei, en el centro de los Dolmitas y escogía dormir en su vehículo con su perro y entrar al hotel sólo para utilizar la ducha.
Tal es la relación con Zar, que él mismo explica que si puede dormir con su perro lo hace "aunque sea en un huequecito pequeño”, ya que "es como si a un ciego le quitas el lazarillo", expone en El País. Este joven border collie se ha convertido en inseparable y el propio Merillas constata que su perro "está hasta las narices de mis entrenamientos, no te imaginas por dónde le meto".
Asimismo, no duda en afirmar que su border collie iba con él incluso a esquiar, y aseguró que "el 70 u 80% de sus victorias pertenecen a su inseparable compañero de cuatro patas". En Zar ha encontrado la motivación extra que necesita para marcar la diferencia y conseguir la fuerza que necesita cada día para levantarse a entrenar, “él es el que me entrena, el que me hace salir todos los días y el que me hace esforzarme, ir más rápido y hacerlo mejor cada día", confesaba el deportista.
De hecho, tras ganar una de las carreras de UTMB, del Ultra Trail de Mont Blanc, el pasado agosto de 2022. explicaba que Zar cada día sale a correr con él e incluso es más veloz que él mismo. "Al final yo lo veo delante y tiro por él pero es que es imposible, es como intentar seguir a un Fórmula 1", señalaba.
En un futuro no muy lejano la próxima aventura en la podrían verse sumidos Merillas y su inseparable Zar sería conquistar el Himalaya, siguiendo los pasos de grandes nombres del deporte como Kilian Jornet.