El presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, Francisco Marín, decidirá este miércoles 7 de mayo, si finalmente se ejecutarán las obras de defensa de las márgenes del Sil o, si por el contrario, da carpetazo definitivo al proyecto.
Para ello, el máximo responsable del organismo de aguas se trasladará a las oficinas que la Confederación tiene en el pantano de Bárcena donde mantendrá un encuentro con el alcalde de Ponferrada, Samuel Folgueral y miembros de la plataforma Ponfesil, con el fin de buscar el consenso, que permita sacar adelante el proyecto. Tras los resultados del encuentro, Marín decidirá si finalmente la obra sigue adelante o si se paraliza definitivamente.
En el encuentro también participará el subdelegado del Gobierno en León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, que se ha implicado de manera decidida en el proyecto, con el fin de evitar que haya conflicto entre las partes y las obras puedan salir adelante. Y es que el objetivo del presidente de la Confederación es que la obra se ejecute en un escenario de “conflicto cero” en el que no haya “vencedores ni vencidos”.
Para agilizar los trámites, la Confederación ya ha adjudicado las obras a la empresa Cyes Infraestructuras por un importe de 1,7 millones de euros, aunque habrá que esperar al encuentro de mañana para comprobar si finalmente los trabajos se llevarán a cabo.
