Distintos cargos orgánicos y con representación en las cámaras parlamentarias autonómicas, nacionales, locales y provinciales de Galicia y León reclamarán al Gobierno la puesta en marcha de un plan extraordinario e integral de conservación y mantenimiento para la autovía A-6.
Así lo acordaron en el transcurso de una reunión de trabajo mantenida este domingo, en As Nogais (Lugo), en la que participaron los presidentes provinciales lucense y coruñés, Elena Candia y Diego Calvo, respectivamente, además de diputados y senadores de la provincias de Lugo, Ourense, A Coruña y León y alcaldes de portavoces de los municipios por los que discurre esta arteria de comunicación que es la puerta de entrada a Galicia desde la Meseta, y cuyo trazado está más deteriorado.
De este modo, con esta ofensiva conjunta y que demuestra “un compromiso claro de los ‘populares’ con el territorio”, según lo explicó el diputado en el Congreso Paco Conde, también se insta al Ejecutivo en funciones a consignar partidas presupuestarias plurianuales concretas para atender las necesidades inmediatas, así como actuar en caso de que se vuelvan a producir nuevos desprendimientos o incidencias que puedan ocasionarse por consecuencia de fenómenos meteorológicos adversos típicos del invierno y de zonas de montaña como es este caso.
Se trata, remarcó, de garantizar la seguridad vial a usuarios que discurren por esta vía cuyo firme “está muy deteriorado”, sobre todo, en los carriles derechos, los de aceleración y de frenada, correspondientes a los setenta kilómetros que separan el municipio lucense de O Corgo del berciano de Villafranca del Bierzo.
En un comunicado, señalan que las interrupciones de la circulación derivadas del mal estado, de desprendimientos o de otras obras como las del viaducto del Castro constituyen un enorme problema para los más de 10.000 vehículos que diariamente se mueven por esta vía, de los que muchos son de transporte pesado vinculado al tráfico portuario, industrial, de distribución y especial.
Remarcan que asociaciones como Tradime (asociación de empresarios de transporte discrecional de la provincia de Lugo) o AETRAM (asociación empresarial de transportes Río Miño) también manifestaron en varias ocasiones su clamor en este sentido.
En este sentido, los ‘populares’ recalcan que la situación actual de la autovía es consecuencia del abandono en materia de conservación y mantenimiento, sin que el Gobierno tenga la capacidad de reacción para acometer de manera urgente las actuaciones que garanticen tanto la seguridad como la restitución de los impactos derivados de la caída del viaducto y los desprendimientos que se están produciendo.
Por ello, piden una planificación integral de conservación y mantenimiento, con la consiguiente dotación presupuestaria y la licitación y realización de obras de conservación adicionales a las actuaciones realizadas con los contratos de conservación y explotación por sectores en los que se divide la Red de Carreteras del Estado.
Dicha planificación, apuntan, debe incluir un plan de choque extraordinario para solventar los problemas identificados en los firmes y las estructuras, así como un programa de gestión preventiva de elementos como muros, desprendimientos, obras de paso y mismo actuaciones de emergencia a causa de fenómenos adversos, derivados de temporales de nieve o lluvia típicos de las zonas de montaña, como acontece en este caso.
La diputada leonesa Silvia Franco indicó que “este es un frente común para una vía estratégica”. “En nuestra provincia son muchas lanas deficiencias que tiene en lana degradación de él firme y viaductos que también se han caído. Con este acto, queremos unirnos al Partido Popular de Galicia para defender una autovía segura. No queremos ni más parches ni remiendos; lo que queremos eres una autovía de primera que en el arrincone ni política ni socialmente a los leoneses ni a los gallegos”, señaló.