Este contrato supone a las arcas del Ayuntamiento de Cacabelos el pago de 210.444,44 euros a la empresa. SxC e IU han acusado a UTE CÚA de incumplimientos reiterados de determinados servicios, así como de no acogerse a los plazos establecidos para las entregas de los informes de actuación. Los grupos responsables de la moción presentada a pleno insisten en que la empresa prescindía de ciertas comprobaciones técnicas, mediciones, limpiezas, mantenimientos y actuaciones varias requeridas en el contrato.
A la hora de defender la moción, Susana Vila (IU), ha instado al Ayuntamiento a aprobar una auditoría externa "preferentemente pública" sobre el incumplimiento del contrato, así como un informe de cuentas sobre el cual se proceda a la rescisión del contrato, todo ello con el fin de que "el Ayuntamiento afronte la menor deuda posible". En conclusión, la portavoz de Izquierda Unida ha insistido en que "el objetivo de los representantes públicos es velar por el bienestar de los vecinos de Cacabelos, pero este contrato es malo y lacra al municipio".
Por su parte, Maika González (SxC) ha expuesto que la empresa "ha incumplido reiteradamente el contrato que mina las cuentas municipales". González se ha valido de cifras para sustentar la moción presentada: "el coste medio del alumbrado público del Ayuntamiento de Cacabelos era una media de unos 50.000 euros, que haya que pagar 250.000 a una empresa que incumple el contrato solo es defendible por quien tenga otros intereses".
Adolfo Canedo (PP) se ha defendido a las acusaciones implícitas y explícitas puntualizando que el 'tripartito' de la anterior corporación (PSOE, IU y Alternativa Ciudadana, con Sergio Álvarez como alcalde) "no hizo nada en cuatro años" para solucionar el conflicto. Asimismo, ha protestado que "la moción es un cúmulo de mentiras y falsedades".
Finalmente, la portavoz del PSOE Cristina García, ha recordado a los presentes que rescindir el contrato obligaría al Ayuntamiento a pagar una indemnización de un determinado tanto por ciento, más daños y perjuicios. A su vez, ha lamentado que esta rescisión debió hacerse hace tiempo y habría sido "mucho más económico" para las arcas municipales.
Contrato presuntamente ilícito
En 2014 el Ayuntamiento de Cacabelos, con el Partido Popular al frente y siendo alcalde Adolfo Canedo, adjudicó este contrato por valor de 2,5 millones de euros y con un plazo de ejecución de 12 años. La adjudicataria solicitó una ampliación del plazo de recepción, que fue aceptada por el consistorio en el año 2015. En 2016, el alcalde Sergio Álvarez rechazó esta posibilidad y la empresa decidió llevar el caso a los tribunales.
Por su parte, el equipo de Gobierno presentó una denuncia ante la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada para someter a investigación la privatización del alumbrado de la Villa del Cúa, para dilucidar si Adolfo Canedo incurrió en delitos de prevaricación, fraude y administración desleal. En la misma línea, la denuncia apuntaba a UTE CÚA por presuntos delitos de estafa y apropiación indebida.