El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, defendió este miércoles que están “corriendo” en las inversiones para “igualar” el ritmo de ejecución entre el corredor Atlántico con el Mediterráneo, y advirtió de que para la reapertura de la Ruta de la Plata queda “todo por hacer” porque es ahora un eje verde sin vías.
Así lo expresó en su comparecencia en la sesión extraordinaria para informar de las líneas generales de la política de su departamento, en la que arrancó con la invitación a los grupos de un consenso mínimo de país para dejar a las infraestructuras fuera de “la batalla política” y de los “agravios”.
Más ritmo en el desarrollo del Corredor Atlántico en desventaja sobre el relativo al Mediterráneo demandaron el diputado del BNG Néstor Rego y la diputada del PNV Maribel Vaquero, que reclamó además la conclusión de la Y Vasca para la conexión de la alta velocidad con Burgos y Europa.
“Estamos corriendo para igualar el ritmo del Corredor Atlántico sobre el Mediterráneo que lleva cierta delantera”, respondió el ministro, que señaló la inversión de 6.150 millones en el Mediterráneo y los 5.769 millones licitados en el del Atlántico, aunque reconoció que la ejecución es distinta en ambos.
El portavoz del PP en la materia, el diputado abulense Héctor Palencia, se interesó por “las reivindicaciones justas” del tren veloz a Extremadura, por la falta de conexión de Ávila a la alta velocidad o autovía para ir a Madrid y por la Ruta de la Plata, sobre la que anotó que el Gobierno rebaja la posición de la Unión Europea en relación a la red básica.
Puente se comprometió a mejorar la conexión ferroviaria de Ávila con Madrid y recordó que se acaba de licitar el estudio de viabilidad León-Plasencia de la Ruta de la Plata para analizar el coste-beneficio, pero advirtió que se arrancaron las vías y es ahora un eje verde, donde “está todo por hacer”.
En línea con su primera intervención sobre el debate de “agravios” que suscitan las obras viarias y denuncian los territorios, argumentó en su réplica que “nadie se reconoce en los privilegios y todos en los agravios”, lo que, en su opinión, no puede ser así, aunque en el caso de Extremadura afirmó que tiene “razones para sentirse agraviada y olvidada” por los gobiernos del PP.
Además, aseguró que la planificación de infraestructuras centrada desde Madrid está cambiando y miró a la próxima U de Olmedo (Valladolid) que con una inversión en ocho kilómetros permitirá que la alta velocidad desde Galicia conecte a País Vasco y Cataluña sin tener que pasar por Madrid.
Puente aseguró que la Y Vasca es “una prioridad” con trece tramos de diecisiete ya para construir la superestructura y un problema en el nudo de Arcaute (Álava), pero afirmó que en los próximos meses estarán en disposición de avanzar y “desbloquear” el proyecto de alta velocidad en Euskadi.
Para rebajar expectativas que no se puedan cumplir y denunciar “agravios” desde los territorios, abogó por realizar estudios serios de coste-beneficio a la hora de comprometer plazos y realizar una programación “más sensata”, lo que extendió a nuevas actuaciones en carreteras.
El ministro, en un momento del debate con los grupos en su comparecencia, dudó de la gestión de PP-Vox en Castilla y León, replicado por Héctor Palencia con los resultados del informe PISA que otorgan los mejores registros a la educación impartida en esta comunidad. “Sí, Castilla y León está bien en educación, pero tiene el ránking en despoblación”, apostilló Puente.
Por último, manifestó que no está en el Ministerio para ser la oposición de gobiernos como los de Castilla y León o Cataluña, aunque no le gusten, pero los respeta, en su intención de entenderse con los que han elegido los ciudadanos. “Si en Castilla y León gobierna el PP, será porque sus ciudadanos están satisfechos con su gestión”, remató.