
El sábado a las 22.00 horas comenzó el toque de queda en Castilla y León, que finaliza a las 6.00 horas y estará vigente por un plazo de 14 días, en función de la situación, con el fin de frenar el avance del COVID-19.
La capital berciana dio ejemplo del acatamiento de esta medida, con calles vacías y silencio sepulcral, solo roto por los trabajadores exentos de la medida. El Ayuntamiento ha informado que la primera noche se ha saldado sin incidencias reseñables, destacando el comportamiento "ejemplar" de los ponferradinos.
*Aquí puedes leer las nuevas limitaciones de obligado cumplimiento

















