Las Asociaciones demandantes ya han presentado su escrito de conclusiones y el Juzgado ha dado un plazo de 10 días al Ayuntamiento de Ponferrada y a Somacyl para que presenten sus conclusiones. Después de este trámite, el pleito quedará visto para Sentencia. Los vecinos de Compostilla consideran que durante el juicio han quedado acreditadas las irregularidades urbanísticas en la construcción de la central térmica. Al mismo tiempo creen que es “totalmente imprudente la “huida hacia adelante” del Ayuntamiento de Ponferrada que pretende poner en marcha una instalación, que incumple el Plan General (PGOU) y el Plan Parcial aprobado en esa zona”. En su momento los vecinos pidieron que el proyecto no se ejecutase hasta que se analizase su legalidad urbanística, que niegan en todo caso.
Recuerdan que el Ayuntamiento aprobó la instalación sin licencia ambiental y a través de una “autorización provisional” que obvió que se trata de un uso prohibido según el PGO. Por si todo ello fuera poco, la central de calor se hace en una parcela donde estaba previsto un parque. En el supuesto de estimarse la demanda judicial, la instalación previsiblemente no podría funcionar ni ponerse en marcha, dejando en el aire el dinero indebidamente gastado en ese proyecto. Esta instalación ha sido denominada informalmente como la “red del caloret” por las prisas y las denuncias por aprovechamiento ilícito de fondos europeos, que han sido denunciados como “un acto de mala gestión e imprudente por parte del Ayuntamiento de Ponferrada”.
Por su parte, desde el Ayuntamiento de Ponferrrada el concejal de Medio Ambiente del anterior equipo de Gobierno, Roberto Mendo, defendió en mayo de 2018 la “transparencia” municipal en la tramitación de este polémico proceso un día después de que el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de León admitiera otra demanda presentada contra la central de biomasa.
El pasado mes de julio el alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón visitó las obras de la central de calor de biomasa del barrio de Compostilla y trasladó la preocupación vecinal existente en el barrio y en otras zonas de la ciudad respecto al cumplimiento riguroso de los estándares exigibles en cuanto a la calidad ambiental, como consecuencia de la generación de esas emisiones y residuos. Los operarios continúan cumpliendo con el calendario de la central para comenzar a suministrar energía a partir de biomasa para abastecer de electricidad a diversos edificios públicos de la ciudad.