El secretario general del PSOE en Castilla y León, Luis Tudanca, tendió la mano al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, para llegar a acuerdos “puntuales” en materias como el Diálogo Social o la lucha contra la violencia de género, pero le advirtió que “si va a seguir gobernando igual, con los mismos y de la misma manera”, el PSOE mantendrá su “oposición férrea” en las Cortes.
Así lo señaló, en declaraciones recogidas por Ical, durante la comparecencia realizada este lunes ante los medios para valorar la situación política de la Comunidad tras la ruptura unilateral de Vox de los pactos que mantenía con el PP en los gobiernos autonómicos.
Recordó así Tudanca que ya dijo “desde la investidura” que si Mañueco “rompía con la extrema derecha”, el PSOE iba a estar “dispuesto a acuerdos puntuales con el PP y el resto de partidos, salvo Vox, en la defensa de los intereses de Castilla y León”.
No obstante, y bajo la premisa de que “el movimiento se demuestra andando”, Tudanca anunció una batería de medidas que llevarán a las Cortes en los próximos meses para pasar así a la Junta “la prueba del algodón, a ver si han cambiado algo las cosas” o, por el contrario, el Gobierno autonómico mantiene “todos los retrocesos y políticas de extrema derecha, se hagan con o sin Vox”.
En esa batería de medidas, el líder socialista en la Comunidad incluyó la recuperación “de forma íntegra” del Diálogo Social, así como su restitución “a lo que era hace cinco años”, antes de la llegada de Mañueco a la Presidencia de la Junta.
También pedirán la recuperación de programas en materia de prevención de riesgos laborales, de igualdad o de resolución de conflictos entre trabajadores y empresas, así como la puesta en marcha de dos leyes para “defender y avanzar en los derechos del colectivo LGTBI+ y en la lucha contra la violencia de género”.
El PSOE también solicitará la derogación de los “retrocesos” en materia de memoria democrática que, recordó Tudanca, “el PP pactó con Vox” con una propuesta de ley de concordia que, aunque aún no está aprobada, sí supuso un cambio, según el líder socialista en la Comunidad, ya que en estos dos años y medio “se ha eliminado la financiación de cátedras para la promoción y difusión de la memoria democrática y se han producido recortes en la financiación de las ayudas a las asociaciones que apuestan por la recuperación de la memoria democrática y de los restos de las víctimas de la Guerra Civil y la dictadura franquista, que siguen en las cunetas”.
En ese sentido, el PSOE exigirá la retirada de la firma del Partido Popular a esa proposición de ley que, apuntó, “se sigue tramitando”, por lo que también pidió a la Junta que “informe desfavorablemente” de la misma, y pondrá en marcha, por último, una iniciativa “para ver si el PP se compromete o no en la lucha contra el cambio climático y en la promoción y defensa de la Agenda 2030” y otra para avanzar en las mejoras de las condiciones laborales del dispositivo de prevención y extinción de incendios.
Reservas ante el posible “paripé”
Esta batería de iniciativas se enmarcan en esa “prueba del algodón que tiene que superar Mañueco”, según Tudanca, para “ver si el Partido Popular tiene alguna intención de romper con Vox y la extrema derecha”, algo que el líder socialista pidió que se produzca en los ayuntamientos porque, por el momento y a su juicio, “Vox ha roto con el PP, pero el PP no ha roto con Vox”.
“Hasta que no resolvamos esa incógnita, nada habrá cambiado”, afirmó Tudanca, que lamentó que tanto el presidente de la Junta como el de la Comunidad Valenciana estén “suplicando a Vox que no se enfade mucho” para “seguir pactando y dialogando con ellos”. Por ello, para poder llegar a esos acuerdos “puntuales”, consideró que “no vale una ruptura a medias”, sino que los ‘populares’ deben “dar un paso adelante y demostrar con políticas y hechos ese alejamiento y ruptura con la extrema derecha”.
De lo contrario, calificó de “paripé” esa ruptura, máxime cuando Mañueco “ha demostrado que es un político marxista que dice que si no nos gustan sus principios, tiene otros con tal de seguir en el poder”, mientras “malgasta el dinero de los castellanos y leoneses” en un vicepresidente y un gobierno “inútil y radical”.
Porque, a juicio de Tudanca, “Castilla y León sigue paralizada” desde que gobierna Alfonso Fernández Mañueco, con “algunos de los peores datos de crecimiento económico y creación de empleo” mientras la Comunidad “sigue quedándose atrás, despoblándose, aumentando los desequilibrios territoriales y viendo cómo los jóvenes huyen”.
Por todo ello, concluyó que “el programa de gobierno de Mañueco sigue siendo un fracaso, desgobierne con quien desgobierne”, recordando que “nada cambió” tras la ruptura con Ciudadanos y aventurando que lo mismo puede suceder con Vox tras la “opa hostil” lanzada para hacer “un gobierno de tránsfugas”. “Ya ha comprado al consejero de Cultura”, ironizó, señalando que “se aferran a sus sillones mucho más que a sus principios”.
Por último, anunció que el Grupo Parlamentario Socialista pedirá la comparecencia de los nuevos consejeros de la Junta para conocer su programa de gobierno, y les deseó suerte en sus cargos porque “sus éxitos serán buenos para los castellanos y leoneses”.
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