La Junta de Castilla y León no ha detectado reticencias al proyecto de una posible reintroducción del lince ibérico en las provincias de Palencia y Zamora, según afirmó hoy el jefe del Servicio de Espacios Naturales de la Dirección General de Patrimonio Natural y responsable técnico de proyecto, David Cubero.
“No tenemos lince estable en Castilla y León. Hay presencia puntual en Ávila, Zamora y Palencia. No se ha observado rechazo por el proyecto. Veremos hoy el resultado de estas jornadas de trabajo. Ayer la tuvimos en Palencia con el mismo formato y fueron reuniones muy interesantes en las que todos aprendimos mucho”, consideró.
“No conocemos desventajas sobre este proyecto. Es una marca de calidad que genera beneficios en la caza menor y es un control de las poblaciones de mesocarnívoros. Entendemos que es algo positivo para Zamora y para Castilla y León. El proyecto está teniendo en todos los territorios de España”, aseguró.
David Cubero hizo estas declaraciones en el Salón de Actos del Centro de Salud ‘Santa Elena’, en la capital zamorana, antes de participar en la jornada titulada ‘Reintroducción del lince ibérico en Castilla y León’.
“El objetivo de la jornada de hoy es continuar con el proceso de participación, con el compromiso que hemos adquirido desde la Junta con los territorios implicados en el proyecto de reintroducción del lince. Es el resultado de aplicación de estudios técnicos, de protocolos aprobados a nivel nacional, y ahora estamos trabajando con los sectores implicados, cazadores, ganaderos, propietarios, alcaldes, vecinos y entidades conservacionistas que puedan aportar sus inquietudes y pareceres sobre este proyecto”, insistió.
Además, la jornada cuenta también con la aportación de expertos procedentes de Castilla-La Mancha y de Andalucía, quienes expondrán su experiencia en la gestión del lince en España.
La jornada contó también con la participación de la delegada territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, Leticia García, y del jefe del Servicio Territorial de Medio Ambiente, Manuel Moreno. Estaba prevista también la presencia del director general de Patrimonio Natural y Política Forestal, José Ángel Arranz, quien no pudo acudir por motivos de salud.
“Este estudio de la reintroducción del lince en Zamora y en Palencia, que eran las dos zonas preseleccionadas por la Junta para plantear al Ministerio de cara al año que viene esta posible reintroducción se iba a hacer de forma participativa, explicando, informando y con la participación fundamentalmente del territorio, de los alcaldes y de los afectados”, recordó la delegada territorial.
16 municipios
“La jornada de hoy contará con dos mesas técnicas dirigidas a los ayuntamientos y a los propietarios de los terrenos. Eran 16 municipios los afectados por la posible introducción. En la segunda mesa participarán agricultores, ganaderos y cazadores para que aporten también sus ideas. Por la tarde, será una jornada de puertas abiertas para cualquier persona interesada”, describió.
En este contexto, Leticia García incidió en que “se trata de conocer el parecer de los territorios” y en que “nada está determinado” al respecto. “Se ha dicho que tiene muchas ventajas esta posible reintroducción de este felino pero tenemos que hacerlo contando siempre con lo que quieran los afectados. La decisión última no depende de la Junta de Castilla y León, sino que trasladaremos la propuesta para que el Ministerio decida”, puntualizó.
El lince ibérico ha existido en Castilla de León hace menos de medio siglo, por lo que se trata de “recuperar una especie amenazada, endémica y única en el mundo, que solamente tenemos en España”, según destacó David Cubero.
“No hay ni una sola limitación en la agricultura. Las limitaciones podrán venir de otros sectores, otras normativas sectoriales, pero la reintroducción del lince no conlleva ningún tipo de limitación en cuanto a uso herbicidas o tipos de siembra”, subrayó.
Limitación de velocidad
Respecto a las limitaciones de velocidad, que han provocado “cierta controversia”, la Junta ha elaborado un documento para la participación pública que está colgado en la página web de la Administración autonómica. “En ningún territorio donde existe el lince se plantea colocación de radares ni disminuciones de velocidad, aunque se está trabajando en señalización, creación de vallados direccionales para evitar que entre la fauna en la carretera y sacar conejos de las cunetas para evitar que sea un punto de atracción”, enumeró.
“En todo caso, tenemos una realidad que es una pena, pero nuestros dos territorios son desiertos demográficos. Para que fueran puntos negros de lince, se necesita una gran población de Linz y que sean unas grandes vías de comunicación. En Castilla-La Mancha y en Andalucía son nacionales que unen grandes núcleos de población, con una presencia muy importante y una densidad muy alta de lince”, apuntó David Cubero.
Por lo que se refiere a la ganadería, una posible reintroducción del lince supondría una afección “mínima”, según atestiguan los datos científicos recabados. “Los daños van más orientados a gallineros. Si se produjeran esos daños, la Junta de Castilla de León financiaría medidas de corrección de esos gallineros, además de los daños que pudieran ocasionar sobre las gallinas”, concluyó.