El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, anunció este martes la extensión progresiva en todas las provincias de los robots quirúrgicos entre 2024 y 2026 y la incorporación a más áreas de salud de nuevos exoesqueletos para facilitar la movilidad en pacientes pediátricos con problemas de daño cerebral.
Asimismo, se instalarán estaciones de telemedicina avanzada en todas las residencias de la Junta para permitir el control de las constantes vitales de los usuarios y para hacer seguimientos y actuar ante cualquier problema de salud. A ello se suma, que se extenderá el uso de robots sociales en nuestras residencias para acompañamiento y desarrollo de actividades de conversación y ejercicio físico con personas mayores y dependientes.
La tercera vía anunciada por el presidente Mañueco persigue mantener a Castilla y León en la vanguardia tecnológica. En esta línea, el Gobierno autonómico está trabajando en aumentar diez veces la potencia del supercomputador Caléndula, facilitando el acceso a más empresas, con aplicaciones en investigación biomédica, diseño de materiales, procesos industriales o mejoras en la producción silvícola, entre otras.
Se desarrollará un plan integral de apoyo a la digitalización empresarial, utilizando las tecnologías de vanguardia en el cuidado y la gestión del patrimonio, para lo que se culminará la plataforma digital para la gestión inteligente del Patrimonio Cultural de Castilla y León, y se desarrollará el proyecto KHN RETECH, en colaboración con Aragón y Galicia, para la gestión digital integral del patrimonio.
Se implantará el servicio ‘Sacyl te responde’ para mejorar la información y la gestión sanitaria en horario 24 horas y siete días a la semana. Y se extenderá la teleasistencia avanzada, para llegar a 50.000 personas en 2025; un sistema que ofrece dispositivos para detectar fuego, humo o gas, localizadores GPS y seguimiento telefónico personalizado, entre otras prestaciones.
También se instalarán estaciones de telemedicina avanzada en todas las residencias de la Junta, que permiten el control de las constantes vitales de los usuarios para hacer seguimientos y actuar ante cualquier problema de salud, y se extenderá el uso de robots sociales en las residencias para acompañamiento y desarrollo de actividades de conversación y ejercicio físico con personas mayores y dependientes.