Confederación contempla el derribo de la ‘polémica’ presa de San Facundo antes de 2027

El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó el pasado martes 22 de junio la consulta pública del Plan Hidrológico de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil para el periodo 2022-2027. El documento recoge la demolición de la presa del Real, ubicada en la localidad de San Facundo (término municipal de Torre del Bierzo), titularidad del Ayuntamiento de Bembibre y que abastece a dicho municipio. El importe que contempla el organismo de cuenca para la intervención asciende a los 2,3 millones de euros.

Esta presa ‘contiene’ tras de sí años de polémica, pues lleva desde su construcción a mediados de los años ’80 en situación de irregularidad. Además de que no reúne las condiciones que exige la normativa para una infraestructura de tales dimensiones, se encuentra colmada de barro con los consecuentes arrastres de lodo y, además, tanto el Ayuntamiento de Bembibre como CHMS llevan años alegando el argumento de que la presa ya no cumple ninguna funcionalidad.

Su demolición lleva años en estudio sin que el Consistorio de la capital del Bierzo Alto y Confederación fijaran el rumbo a tomar para ‘hacer añicos’ el dique. Hasta que finalmente la demolición de la presa se ha incluido en el apartado de ‘Restauración de ríos’ del Plan Hidrológico 2022-2027, apelando a la “eliminación de infraestructuras en desuso”.

“En la demarcación del Miño-Sil, un 28,92% de las masas de agua superficial están sometidas a presiones hidromorfológicas significativas. El Programa de Medidas prevé 35 medidas de mejora de las condiciones con un coste total estimado de 62,686 millones de euros. Destaca la mejora de los procesos ecológicos y recuperación de la continuidad longitudinal y conectividad lateral con sus llanuras de inundación en los ríos Burbia, Miño, Ladra, Cúa, Tea y Limia, por 7,5 millones de euros; así como la eliminación de infraestructuras en desuso como la de presa Gudín en el río Faramontaos (Xinzo de Limia-Ourense) por 1,2 millones y la presa de San Facundo en el municipio de Bembibre, por 2,3 millones”, recoge la consulta pública del Plan.

La demolición será financiada en su totalidad por la Confederación Hidrográfica Miño-Sil y se considera como necesaria para alcanzar los objetivos medioambientales previstos por la Directiva Marco del Agua. Se trata en cualquier caso de una previsión cuya inversión requiere que el Gobierno libere los fondos necesarios, pues a día de hoy la CHMS no dispone del músculo solvente para acometerla, por lo que será financiada con fondos del Estado.

El Plan Hidrológico de la CHMS se mantendrá en periodo de consulta pública en la página web del organismo durante el plazo de seis meses para que los documentos sean consultados y quien así lo considere pueda presentar las propuestas, alegaciones o sugerencias que estime oportunas.