La veintena de personas que desde el lunes mantienen un encierro indefinido en el vestíbulo del Hospital del Bierzo afrontan el cuarto día de movilizaciones con “ganas de seguir luchando por nuestras reivindicaciones”, según señaló a Ical Lisardo Astorgano, uno de los portavoces de la protesta, que celebró que con el paso del tiempo “se va uniendo más gente”. El colectivo no recibió durante la mañana de hoy la visita de ningún responsable del centro, después de que en la tarde de ayer presentaran su exigencia para mantener una entrevista con el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado.
Al respecto, Astorgano confió en recibir la visita del gerente del centro, José Antonio Visedo, a lo largo de la tarde. Visedo recibió a los integrantes de la protesta el martes y les pidió que “no alborotasen”. La asamblea celebrada a las 12 horas de hoy decidió seguir adelante con el encierro y poner en marcha una serie de acciones de difusión y promoción.
Entre esas acciones, los integrantes de la protesta, miembros de la Asamblea de Usuarios de la Sanidad Pública, han realizado la grabación de una performance en la que una madre y su hijo acuden al centro médico y deben enfrentarse a los problemas denunciados por el colectivo. El vídeo, en proceso de producción, se distribuirá en los próximos días por las redes sociales, donde miembros del colectivo ya han subido diversas imágenes denunciando el estado de las infraestructuras del Hospital.
Además, los protagonistas del encierro también están ayudando a las personas que pretenden interponer una reclamación y están llenando una de las columnas con ‘post-it’ en los que los usuarios identifican las carencias del Hospital. Junto a estas acciones, los miembros de la Asamblea también han puesto en marcha el reparto de trípticos por las consultas para difundir las acciones del colectivo.
Entre las exigencias de la Asamblea de Usuarios también figuran otros puntos como la publicación semanal de las listas de espera de pruebas diagnósticas y quirúrgicas, el fin de las “peonadas” a la hora de contratar personal, la implantación de un turno de tarde para enfermeros y médicos o el fin de la derivación por conciertos a clínicas privadas. Estas demandas se suman a las exigencias para reabrir las 36 camas sin utilización en el centro y para eliminar “de forma inmediata las polémicas Unidades de Gestión Clínica (UGC), que a juicio de la Asamblea, suponen una “clara privatización encubierta”.
Por su parte, los responsables de la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública del Bierzo, que agrupa a instituciones y colectivos de la comarca, se desmarcaron de la protesta puesta en marcha por la Asamblea de Usuarios. “Nada tenemos que ver con este tipo de acciones no aprobadas por la mayoría de nuestros 50 integrantes”, aseguraron a través de un mensaje en las redes sociales.