El entrenador del Clínica Ponferrada, Oriol Pozo, atendió a los medios en la previa del encuentro frente al Biele ISB para analizar la actualidad del equipo berciano tras derrotar a La Salud Archena. En este sentido, reconoció que «anímicamente, ha sido una semana muy buena después de una victoria importante por cómo se produjo y lo que supuso: recuperar el average». No obstante, aclaró que «ha sido una semana como cualquier otra, centrándonos en nuestras cosas para seguir mejorando y preparando el partido del domingo».
Recordó, eso sí, que el de la ida ante Biele ISB «es el único partido de la temporada en el que no hemos tenido ninguna opción de competir por la victoria. Fueron muy superiores», reconoció el adiestrador catalán, que añadió que «en defensa no fue muy malo, pero en ataque el equipo estuvo espeso. Teníamos alguna baja importante, pero el equipo no estuvo en disposición de ganar en ningún momento», admitió el preparador tarraconense, que espera que el equipo pueda «llegar mucho mejor que aquel partido. Tendremos alguna opción», remachó.
Es optimista Pozo y tiene claras las opciones de su equipo: «No tenemos que creernos superiores a nadie, pero tampoco inferiores. La dinámica ayuda, pero lo importante es el día a día», puntualizó el técnico del conjunto berciano, que afirmó que «las victorias son un refuerzo, pero lo que nos refuerza positivamente es el nivel en el día a día en los entrenamientos. Es la mejor manera de coger sensaciones para este partido», precisó el míster blanquiazul, que tiene claro que el equipo debe plantear un partido en el que sea «competitivo».
No obstante, sabe de la dificultad en «una de las pistas más complicadas de la categoría, ante un equipo que es segundo por méritos propios y está haciendo una gran temporada. Sabemos de la dificultad, pero planteamos la semana para tratar de ser competitivos», especificó Pozo, que tiene claro que «será un partido de desgaste ante un equipo que sabe el ritmo al que tiene que jugar. Llegamos en buen momento», puntualizó el entrenador catalán, que consideró que la mejora «a nivel de rebote y defensivo ha sido muy grande».
En este sentido, cree que «la clave es ser competitivos los 40 minutos. Es una pista en la que es complicado imponer el ritmo», detalló Pozo, que consideró fundamental «ser muy sólidos en el rebote y en defensa» porque, consideró, «va a haber fases en las que tendremos que estar bien en otras facetas del juego. Va a ser un partido que hasta el último momento no se va a decidir», asumió Pozo, que cree necesario «tener la capacidad de aguantar los momentos que se hacen fuertes. Tendremos malos momentos; dependerá de cómo aguantemos esos momentos», aseveró.
De hecho, es optimista y espera sacar algo positivo. «Si no creyera que podemos ganar, no viajaríamos», argumentó Pozo, que aseguró que el equipo irá «con ilusión de hacer un gran partido, de continuar esta línea. El equipo está en un nivel de confianza alto después de estos tres partidos», detalló el técnico, que volvió a valorar positivamente las llegadas de Kingsley Obiorah y Pau Treviño: «En el rebote han tenido aportación directa. Le han dado solidez», recalcó el catalán, que añadió que «han tenido un impacto muy grande en el día a día».
En este sentido, opinó que «son dos jugadores de muy buen nivel» que al cuerpo técnico le complican «por saber quién tiene que jugar más y quién menos. Se ha notado en los resultados y en el juego», argumentó el adiestrador catalán, que reconoció que «es una dificultad para gestionar el grupo», aunque aclaró que les «da tranquilidad por poder tener un fondo de armario» que les ayuda. «Tener para elegir complica repartir minutos», razonó Pozo, que se mostró satisfecho porque «todo el mundo está trabajando a su máximo rendimiento».
Con la permanencia muy cerca después de acumular 11 victorias, el técnico se mostró cauto y reconoció que «hasta que no es matemático no puedes decir que tienes algo hecho. Normalmente, con diez llega, pero con la igualdad que hay será necesario alguna más», explicó Pozo, que aclaró que «con la distancia que hay con el play-out, es poco factible que haya sufrimiento. Si no ganas ningún partido, habrá sufrimiento», puntualizó el estratega de Tarragona, que recordó que quería «llegar a esas victorias para estar en una posición tranquila».
No obstante, no es conformista el técnico del conjunto berciano y, a falta de seis partidos, insistió en que el equipo quiere ganar «el máximo de partidos posible» a pesar de tener claro que «todos los partidos son complicados. Va a depender del nivel del equipo y de los rivales», agregó el preparador de la escuadra ponferradina, que restó importancia al factor cancha porque, recordó, «todo el mundo se está jugando muchísimo y van a poner un nivel de dificultad máximo. El factor cancha no garantiza nada», resumió.
De hecho, es consciente Pozo de que los partidos que tendrá el equipo en el Lydia Valentín «también van a ser de una dificultad grandísima» porque «el calendario no es fácil. Es un reto para nosotros», puntualizó el preparador catalán, que tiene claro que «en fases con rivales más asequibles otros se enfrentaban con estos rivales» y está seguro de que el equipo llega «en buen momento para afrontarlo» y de que «tiene opciones» de todo en este tramo de competición tan exigente. «No va a ser fácil ganarnos», concluyó.
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