Sara González Uría, la berciana que lidera la selección gallega alevín en el Campeonato de España de Minibasket

De 12 años de edad, la jugadora milita en la Escuela de Camponaraya y el Estudiantes de Lugo

22 de Marzo de 2018
Actualizado: 27 de Marzo de 2018 a las 20:11
sara635 Sara González Uría posa en el Pabellón de Camponaraya con las tres camisetas que defenderá esta temporada

Sara González Uría tiene de serie unas condiciones para el deporte que le hicieron destacar desde muy pequeña. Fue campeona de Castilla y León de Cross a los 7 años de edad, cuando corría a las órdenes de Chus Alonso en su Cacabelos natal. Ya por entonces compaginaba el atletismo con el baloncesto, por el que se ha acabado decantando cuando una lesión de rodilla le puso en la disyuntiva de elegir entre las dos disciplinas. Compaginando entrenamientos y partidos entre la Escuela de Camponaraya y el Club Estudiantes de Lugo, la berciana es a sus 12 años la capitana de la selección gallega alevín que entre los días 24 y 28 de marzo compite en el Campeonato de España de Selecciones Autonómicas de Minibasket en San Fernando (Cádiz).

Fue con 8 años cuando Sara González se incorporó a la Escuela Municipal de Camponaraya. Tenía las cualidades físicas idóneas para empezar a destacar ya con esa edad. “Los fundamentos técnicos se van consiguiendo con el tiempo”, dice su padre y entrenador de la Escuela, Carlos González, al que un período de crecimiento repentino le hizo cambiar los tatamis de kárate por las canchas de baloncesto cuando ya contaba con 16 años y destacaba por su altura. Pasó por la cantera del Elosúa León y luego por el filial del Fundación Baloncesto León, con el que cubrió toda su trayectoria universitaria para ganar seis campeonatos de España, cuatro ligas y dos copas. Y ahora es testigo privilegiado de la meteórica evolución de su hija.

El destino puso a Sara en el trampolín que conectaba la Escuela de Camponaraya y el Club Estudiantes de Lugo a través del entrenador berciano Juanma Copano. Y ahora viaja a la ciudad amurallada tres veces a la semana para entrenar (los lunes se los toma de descanso y los jueves se ejercita en Camponaraya) y también el fin de semana para jugar con el Estudiantes, cuyo ascenso a Liga Gallega en categoría alevín puso a la berciana en el foco de los seleccionadores autonómicos un año antes de lo que le hubiera correspondido por edad. Quinta ya en un Campeonato de España, afronta desde este sábado una nueva cita nacional ya como capitana del combinado gallego, con el que juega dado que el nivel de los equipos bercianos no es suficiente como para aspirar a ser seleccionada por Castilla y León.

“Sara tiene una capacidad de trabajo y de sufrimiento superior a las demás”, determina en primera instancia Juanma Copano, quien también destaca sus prestaciones defensivas y su desborde cuando se pone de cara a la canasta. “Lo que mejor se me da es luchar por los balones”, acredita la jugadora. “Ella es muy buena defensora y muy buena penetradora”, coincide con Copano su padre para advertir de la necesidad de mejorar el tiro, sobre todo ahora que en sus incursiones por la categoría infantil (también antes de cumplir la edad mínima) ya se enfrenta a canastas grandes y no a las de minibasket en las que le resulta muy fácil dejar una bandeja. Su supremacía física ha sido hasta la fecha tan desbordante que no ha tenido necesidad de recurrir al tiro a distancia. “Pero tiene una buena mecánica y la estamos obligando a consumir tiros”, apunta Copano.



Una todocampista que prefiere jugar de alero

Con 1,64 metros de altura, Sara González ya ha pasado por todos los puestos en la pista hasta asentarse en el de alero, su preferido. “Me gusta más el de alero porque así no estoy tan pendiente de coger el balón como base”, explica. “Pero ella es todocampista. En categoría infantil, de hecho, juega más de base y de escolta que de alero”, advierte su padre con el orgullo de que su hija esté disfrutando “a tope” de una experiencia deportiva de primer nivel, la recompensa a muchos kilómetros de viaje cada semana con tres entrenamientos y dos partidos fuera de casa. “Ella no puede hacer actividades con sus amigas. Pero el premio y las satisfacciones deportivas son tan grandes que suplen todo eso”, contrapone Copano.

Más allá de sus cualidades físicas y técnicas, Juanma Copano resalta la “madurez mental” y la “humildad” de Sara, un camaleón capaz de adaptarse al ritmo de sus compañeras en la Escuela de Camponaraya y graduar su rendimiento cuando participa esporádicamente en partidos de liga escolar con este equipo adscrito al Club Origen Bierzo, una iniciativa liderada por Juanma Copano para llevar el baloncesto por distintos puntos del medio rural de la comarca. “Los entrenamientos aquí me permiten seguir teniendo más físico y reforzar la amistad que tengo con mis compañeras”, dice la jugadora berciana tras posar para este reportaje con las tres camisetas con las que juega esta temporada: la del Estudiantes, la de Galicia y la de la Escuela de Camponaraya.

Sara cursa 6º de Primaria con un rendimiento académico hasta ahora notable. Las exigencias se redoblarán al próximo año con el paso al instituto. Bajo las premisas de “dar prioridad a los estudios” y de “no acelerar los procesos”, su familia se plantea la posibilidad de inscribirla en la residencia de jugadores de Estudiantes de seguir con la actual progresión a partir de los 15 años de edad, el momento que determinará el futuro de una de las más firmes promesas del deporte berciano, la misma que, paradójicamente, estos próximos días liderará a la selección gallega alevín en el Campeonato de España de Minibasket.