El acta del trencilla del colegio castellanoleonés puede acarrear graves sanciones para el equipo catalán, que quedó a las puertas de la Segunda División
"Tu hijo va a morir".
— El Chiringuito TV (@elchiringuitotv) June 23, 2024
"hijos de p*ta".
"Tu hijo va a morir".
"que muera vuestra p*ta familia".
🗣️ Mallo Fernández, árbitro del Nástic-Málaga, ha reflejado insultos terribles en el acta del partido. pic.twitter.com/g7KyumxVp2
La pasión por el deporte, más concretamente por el fútbol, provoca intolerables sucesos como los que tuvieron lugar este sábado en Tarragona. El árbitro vasco Eder Mallo, del colegio castellanoleonés y residente en León, ha denunciado amenazas, insultos y un comportamiento injustificado por parte de algunos miembros del equipo local, el Nàstic, a la finalización del encuentro disputado en el Costa Daurada de la ciudad catalana entre el referido equipo y el Málaga que decidió el ascenso a Segunda División del cuadro andaluz después de lograr el empate (2-2) en el minuto 124, es decir, más de los 120 de la prórroga.
Tras el 2-1 de la ida la ciudad de la Costa del Sol, el conjunto tarraconense, que compitió esta temporada con la Deportiva Ponferradina y la Cultural Leonesa y acabó segundo del Grupo I de Primera RFEF, consiguió forzar la prórroga con el tanto de Godoy cerca del final. Incluso se puso 2-0 con el de Santamaría en los primeros minutos del tiempo extra, pero en la segunda parte de la prórroga, Dioni puso la incertidumbre y, aunque este resultado le valía al equipo catalán, Antoñito, en una de las últimas jugadas, en el minuto 124, firmó el gol que devolvió al fútbol profesional al Málaga un año después de su descenso.
No fue un partido fácil y así lo explicó el colegiado en el acta, ya que, cerca del final del tiempo extra, se vio obligado a parar el partido y decidió mandar a los jugadores del Málaga al túnel de vestuarios y a retirar a sus compañeros por el lanzamiento de balones desde la grada. Añade, además, que «en el 33’ se lanzó una moneda de 20 céntimos en el área del portero visitante» y que «en el 72’, tras el gol de Godoy, se observa el lanzamiento de un petardo sobre el campo y la encendida de dos bengalas en las gradas». Reconoce que, tras detener el partido, pudo llegar a «un consenso para continuar […] pudiendo finalizar el partido», remata.
Es entonces cuando sucede lo más grave. En el acta, asegura Mallo que «una vez finalizado el partido, cuando nos retiramos a los vestuarios, un miembro del cuerpo técnico del club local […] empujó» a uno de sus asistentes, afortunadamente, sin consecuencias. No quedó ahí la cosa, ya que, explica, «una vez nos encontramos en vestuarios, pudiendo acceder a ellos gracias a la ayuda de la fuerza pública, se producen multitud de incidentes». Entonces, tras golpear la puerta del vestuario, se dirigen hacia el cuerpo arbitral abriendo la puerta y gritando.
Según el escrito, les gritan lindezas como «Vais a morir», «Sinvergüenzas», «Tu hijo va a morir», «Ojalá os matéis», «Hijos de puta», «Que muera vuestra puta familia», «Cobardes hijos de puta (con amenazas de “os vais a enterar”)», «No tienes huevos», «Tu puta madre» o «Te voy a recibir hasta el final. Si tienes huevos, baja». En el mismo acta, además, el trencilla del colegio castellanoleonés explica que «llegamos a temer por nuestra integridad física. […] La seguridad presente nos indica que les es imposible retirar y controlar a esta gente puesto que según nos dicen "son varios directivos y propietarios del club"», concluye.
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