En lo que respecta a la primera fase de actuación, a mediados del pasado año se realizaron una serie de análisis en laboratorio de muestras tomadas de corteza y raíz en el río Selmo para confirmar esta enfermedad en sus árboles de ribera. En cada punto de muestreo seleccionado se localizaron árboles de aliso sintomáticos. En esos ejemplares su buscó la presencia de síntomas característicos de la presencia de este hongo, y en los casos en los que se detectó, se extrajo de esa zona una muestra que constasen tanto de corteza como de madera. También se tomaron muestras de raíces, que se analizaron en laboratorio para confirmar el diagnóstico.
En una segunda fase de acción se acometieron las actuaciones selvícolas sanitarias pertinentes en el tramo de río confirmado con el objetivo de fortalecer la masa arbórea a conservar y evitar su propagación. En los meses siguientes se realizó un seguimiento y control de la zona mediante nuevos análisis, para concluir el programa de actuaciones con la elaboración de una serie de mapas de estado y de riesgos de esta enfermedad en el ámbito territorial en el que se desarrolla el programa Life+ Desmania.