Según Morala, el regidor “desoye absolutamente las reclamaciones justificadas y razonables del sector del transporte” ante los “riesgos” que supone el nuevo trazado para la movilidad de los camiones. “Se trata de una solución que castiga los intereses de los transportistas de aquí y el alcalde ni los respalda, ni les ayuda, ni hace llegar al Ministerio la necesidad de solventar los actuales problemas, que pueden convertirse aún en mayores con la llegada del mal tiempo en el invierno”, justificó.
En ese sentido, insistió en que las deficiencias de ese acceso provisional para el transporte pesado son “indisimulables”, como demuestran los “sustos” producidos en la zona desde la apertura de la nueva alternativa. “Los representantes del sector han sido muy claros respecto a la necesidad de un diferente tratamiento a las cargas más pesadas o voluminosas mientras no sea posible la circulación por la A-6”, reiteró Morala, que exhortó al regidor a ejercer “una labor de mediación” con el Ministerio para pedir “una solución acorde con las demandas de los profesionales del sector”.