El derrumbamiento sufrido en la AP-66 el pasado domingo ha vuelto a poner en el punto de mira las reivindicaciones en infraestructuras que precisan las conexiones entre el Principado y León, una de ellas toca a la capital del Bierzo, ya que reivindican el eje de autovía La Espina - Ponferrada.
Y es que, ya en julio de este mismo año, desde 'Alianza por las infraestructuras del Estado que Asturias necesita', una unión de organizaciones sociales, cámaras de comercio, los grupos políticos con representación en la Junta General y entidades de distintos ámbitos de la sociedad asturiana, publicó la actualización del acuerdo social y político en el que reivindicaban las infraestructuras necesarias, siendo una de ellas el eje que uniría la capital del Bierzo con la capital asturiana.
La vía rápida entre ambas ciudades es ya una reivindicación histórica, y es que la autovía llega hasta Toreno desde Ponferrada, pero desde allí, y hasta la capital asturiana continúa la CL-631, que desde hace meses también está afectada por un argayo.
Esto suma aún más importancia a la reivindicación, ya que la unión por carretera entre Asturias y León capital cerrada, y la unión entre Ponferrada y Asturias aparcada desde hace años. Así pues, las dos ciudades más importantes de la provincia tienen que recurrir a carreteras nacionales o provinciales para cruzar directamente hasta Asturias.
Desde 'Alianza por las infraestructuras del Estado que Asturias necesita' reclaman el "establecimiento de los acuerdos políticos, mecanismos y permutas necesarias" para que se dé continuidad al eje Salas – Tineo - Cangas del Narcea - límite CCAA en red nacional.
De esta manera se llegaría, y "garantizaría", la vertebración del territorio mediante una vía suprarregional de titularidad estatal para el eje La Espina – Ponferrada. Una vertebración que desde Asturias piden que lleve a cabo el Ministerio de Transportes.
En lo que respecta a la Junta de Castilla y León, en febrero y tras una reclamación del Principado, Carlos Carriedo, consejero Portavoz, aseguró que Castilla y León iría junto a Asturias a reclamar la inversión del Gobierno para esta carretera.
Entonces Carriedo recordó que la A-80 era una "promesa", por lo que desde la Junta se pusieron a disposición del Gobierno de España y del Principado para "colaborar" en la puesta en marcha de esta infraestructura que a Ponferrada le serviría para seguir creciendo como un posible nodo en el noroeste de España.
Este posible nodo se vería completamente cerrado con un posible futuro nudo logístico de mercancías, enmarcado en el desarrollo del Corredor Atlántico. Desde el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible se prevé presentar de forma inminente el Plan Director del Corredor Atlántico en Castilla y León, lo que podría dar alguna buena noticia sobre las infraestructuras para Ponferrada.
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