El alcalde de Ponferrada, Marco Morala, cifró este jueves en 2,5 millones de euros la inversión que será necesaria para reparar las graves deficiencias que sufren las piscinas cubiertas del complejo Lydia Valentín frente al medio millón que se había calculado inicialmente. La empresa pública Somacyl ha realizado un estudio en profundidad, que eleva la inversión hasta esa cifra. La semana que viene se ofrecerán todos los detalles.
Cabe recordar que el complejo se encuentra cerrado por su deterioro estructural en la cubierta y en los vasos. La estructura de hormigón de las piscinas está dañada, debido a las filtraciones de los vasos. El deterioro afecta a vigas y pilares y a toda la instalación, en general, con riesgo de “colapso”.
Además, el pasado mes de septiembre, el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, prometió una inversión de la Junta para las Piscinas del Toralín.
Este anuncio sobre el incremento del coste para el arreglo de las piscinas ha sido comunicado en el balance que ha hecho Morala sobre sus seis primeros meses como alcalde de Ponferrada. El regidor lanzó un mensaje de "ilusión" a la ciudadanía de la capital berciana. “Para mí estos escasos meses siguen suponiendo un reto apasionante porque Ponferrada merece la pena y sus gentes aún más. Ilusión frente al derrotismo, trabajo frente a la apatía, realismo frente a promesas vacías y reivindicación frente a conformismo”, dijo.