La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, huyó este miércoles en Cuéllar (Segovia) de los “blanqueamientos” sobre la violencia de género al asegurar que “no vale confundir con que todo es violencia”. Con motivo del asesinato de María Rosa, la mujer de 36 años a manos de su pareja en Béjar (Salamanca), destacó que hay una violencia “muy concreta” que sufren las mujeres por el hecho de ser mujeres, que es la violencia machista y de género.
Lanzó un mensaje “claro” a los ayuntamientos como el de Ponferrada que quieren “diluir”, bajo unos puntos abstractos de violencia, la realidad que hoy vuelve a azotar de “manera implacable”. En este sentido, recordó, según recogió la Agencia Ical, que el Gobierno de España y la Unidad de Violencia de Género dejó “bien claro” en la Junta Local de Seguridad, celebrada en el Ayuntamiento berciano, que no participará de esos puntos que pretenden difuminar la violencia de género contra la que luchan. Además, Cruz Roja y el Gobierno de España solicitará la instalación de esos puntos violeta, para que las mujeres sigan estando protegidas y tengan una referencia clara, además que la sociedad siga unida en torno a la lucha contra la violencia de género.
Fue entonces cuando precisó que todas las administraciones reciben fondos del pacto de Estado contra la violencia de género. “Vamos a llevar esta lucha fuerte, firme y decidida porque no cabe ninguna otra cosa”, expuso.
Después de que Castilla y León se volviera a “teñir de luto” por el asesinato de María Rosario, que se suma al de Paloma, María Encarnación y la niña India en lo que va de año, Barcones reclamó unidad institucional y que no haya “fisuras” ni se deje ni el más mínimo “resquicio” para que los maltratadores y los asesinos acaben con la vida de sus parejas y exparejas al pensar que son de su propiedad y pueden acabar con ellas. “Lo tenemos que decir alto y claro, ni un paso atrás en la violencia de género y machista y que nadie cometa la irresponsabilidad de dejar ninguna rendija abierta”, sentenció.
La delegada del Gobierno apeló, de nuevo, a las mujeres que son víctimas de la violencia machista para que entren en una comisaría de la Policía o un cuartel de la Guardia Civil para denunciar. “Nuestro trabajo es protegerlas y ayudarlas porque trabajamos cada día para la protección social y el acompañamiento para que salgan de esa violencia terrible”, apuntó.
Virginia Barcones relató, según Ical, lo ocurrido el miércoles en Béjar después de que el presunto agresor llamara sobre las seis de la mañana a la Comisaría de la Policía para informar del crimen y anunciar que su intención era quitarse la vida. El hombre fue encontrado por la Guardia Civil de Salamanca a las 6.18 horas de la madrugada, cuando amenazaba con arrojarse al vacío desde un viaducto en el kilómetro 412 de la autovía A-66, en el mismo término municipal. Algo más de una hora después, los agentes consiguieron convencerlo para que accediera a bajar del viaducto por sus propios medios y, a continuación, fue detenido por la Policía Nacional.
Mientras tanto, la Policía, los bomberos y el personal sanitario del 1-1-2 acudieron al domicilio y encontraron el cuerpo sin vida de María Rosario. Al igual que ya apuntó la Subdelegación del Gobierno en Salamanca, declaró que la mujer asesinada tenía casos anteriores de violencia de género, pero no con esta pareja. Por su parte, el asesino confeso contaba con casos de violencia doméstica hacia su padre y hermano pero no existía ninguna denuncia previa de María Rosario ni orden de alejamiento.