Con el paso de los años, históricas muestras de la grandeza de Ponferrada durante la década de los 50 dejan paso a escombros, literal y figurativamente. Así, uno de esos testigos y exponentes de la ciudad del dólar, pasará a ser parte del ya de por sí amplio listado de edificios derruidos en el centro de la capital berciana. Se trata de un edificio obra del arquitecto José Martínez Mirones, el arquitecto que diseñó gran parte de los edificios del ensanche de La Puebla en los años 50 y 60. En esta ocasión el Ayuntamiento tramita ya la solicitud de derribo para el icónico edificio ubicado en la calle Gómez Núñez, junto al hueco que en su día ocupó el edificio de Los Rojones, derribado en 2018.
José M. Mirones fue uno de los arquitectos que más huella ha dejado en la arquitectura de Ponferrada, donde realizó algo más de tres mil proyectos de obras entre 1943 y 1983, siendo arquitecto municipal entre 1943 y 1975. Este edificio, que en su día albergó los Almacenes Uría, lleva sin actividad más de una década, siendo testigo del paso del tiempo y deteriorándose. Por ello los propietarios, la famía Uría, ha solicitado el permiso de derribo, que estaría ya en fase de resolución.
Este es el motivo por el que desde hace varios meses se está tramitando el expediente de derribo, una obra que tendrá un presupuesto estimado de 200.000 euros, según ha podido saber InfoBierzo, y que sumará un solar más a la zona central de Ponferrada, que podría no ser el único que se sume a este final en los próximos meses.
Frente al antiguo edificio de Almacenes Uría, se encuentra otro edificio del arquitecto Mirones que también podría derribarse; se trata del edificio de uso mixto en venta en travesía Gómez Núñez, 1, sobre el conocido Bar Petit, con un precio de venta de 675 mil euros. Esta propiedad de 1953 cuenta con 1.122 m² construidos, distribuidos en 6 plantas exteriores que culminan con 3 amplias terrazas en la última planta.
Ponferrada era conocida como ciudad del dólar en la década de los 50, tras un vertiginoso proceso de expansión económica basada en la minería, electricidad y transporte. El desarrollo de la ciudad fue rápido y espectacular. Con un crecimiento del 375% a lo largo de la década, convirtiéndose en la primera ciudad de España en crecimiento demográfico. Si en 1950 cuenta con 16.877 habitantes, en 1960 alcanza los 29.222. El proceso de industrialización hace que la llegada de inmigrantes a Ponferrada, procedentes de los pueblos del Bierzo y de las provincias limítrofes, sea extraordinaria. En 1950 el 58,3% de la población era nacida fuera del municipio.
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