Durante el mes de marzo, coincidiendo con la celebración de la Semana Santa, la provincia de León ha experimentado un notable incremento en el turismo.
En cuanto a las pernoctaciones, se ha registrado un aumento significativo del 26,4 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior, alcanzando un total de 107,465 noches. Este incremento refleja el creciente interés de los visitantes por disfrutar de la riqueza cultural y patrimonial que ofrece la ciudad durante esta temporada.
El flujo de viajeros que han elegido León como destino turístico también ha experimentado un notable aumento, con un incremento del 16,2 por ciento en comparación con el año anterior, lo que se traduce en un total de 63,952 personas que han visitado la ciudad durante el mes de marzo.
Los establecimientos hoteleros de Castilla y León anotaron 685.685 pernoctaciones en marzo, lo que supone un impulso del 13,8 por ciento con respecto a las registradas en el mismo mes de 2023, cuando se situaron en 83.000 menos, un importante repunte del que está detrás la Semana Santa que, a diferencia del año pasado (del 2 al 9 de abril), en esta ocasión se celebró en el tercer mes del año.
En el caso de los viajeros, se elevaron un 10,4 por ciento, hasta totalizar en la Comunidad 387.550 personas que pasaron por alguna de las nueve provincias, 37.000 más que el año anterior, según los datos facilitados por hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y recogidos por la Agencia Ical.
A pesar de estos datos positivos, la Comunidad creció a un ritmo más moderado que la media de España, donde las pernoctaciones en establecimientos hoteleros aumentaron un 19,1 por ciento en marzo, cinco puntos más que en Castilla y León, y superaron los 24,5 millones; mientras que la de viajeros lo hicieron un 14,8 por ciento, hasta los 8,4 millones.
En Castilla y León, donde la estancia media en marzo fue de 1,77 días (frente a los 2,90 de España), ocho de cada diez viajeros eran residentes en España (316.296), mientras que el resto, 71.254, extranjeros. En paralelo, el 82,4 por ciento de las pernoctaciones también eran de nacionales, con 565.483, con 120.201 de no residentes.
Por territorios, las pernoctaciones aumentaron, según los datos recogidos por Ical, en todas las provincias, encabezadas, en términos porcentuales, por León, que se elevó un importante 26,4 por ciento, con 107.465 noches. Le siguen, también a dos dígitos, Ávila, con el 16,9 por ciento y 53.558 pernoctaciones; Burgos, un 15,4 por ciento y 111.318; Zamora, con el 13,2 por ciento y 29.341 noches; así como Salamanca y Segovia, con 12,8 y 12,5 por ciento, respectivamente (144.466 y 74.498 noches en cada caso). Por el contrario, crecieron de forma más moderada en Valladolid, un 7,2 por ciento (100.459 noches), en Soria, un 7,1 por ciento (37.902), y en Palencia, un 2,9 por ciento (26.679).
En relación con los viajeros también se elevaron en todos los territorios. Donde más repuntaron fue en Zamora, un 17,9 por ciento, con 16.523 viajeros, seguida de León, un 16,2 por ciento, con 63.952 personas, y Salamanca, un 14,5 por ciento más (79.852 viajeros). Ligeramente por debajo lo hicieron Soria, un 13,3 por ciento más en marzo que hace un año (20.462), Burgos, con un 11,5 por ciento (68.768) y Ávila, un 11,3 (32.362 personas). A un dígito aumentaron Segovia, un 6,4 por ciento (36.971 personas), así como Palencia, con un 0,8 por ciento (14.143), y Valladolid, que cerró con una exigua subida del 0,02 por ciento y prácticamente conserva los resultados de marzo de 2023, con 54.517 personas.
Precios hoteleros y rentabilidad
La tasa anual del Índice de Precios Hoteleros (IPH) se situó de media en Castilla y León en marzo en el 8,82 por ciento, un punto por debajo de España, que alcanzó el 9,97 por ciento. Las comunidades autónomas que presentaron las tasas medias más altas fueron País Vasco (22,15 por ciento) y Asturias (17,8 por ciento).
Por su parte, el ingreso medio diario por habitación disponible (RevPAR), que está condicionado por la ocupación registrada en los establecimientos hoteleros, alcanzó los 29,72 euros de media, con un 15,8 por ciento de subida, cuando en el conjunto del país fue de 69,49 euros, un 12,2 por ciento más. También, la tarifa media diaria (ADR) fue de 66,13 euros, un 11,5 por ciento más, frente a un incremento del 9,7 por ciento en España (109,18 euros).
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