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La tradición se da cita en las Fiestas de La Encina. Como no podía ser de otra forma, los Gigantes y Cabezudos vuelven a ser los vetustos protagonistas de las fiestas. Este miércoles 6 de septiembre recorrieron las calles de Ponferrada desde la Plaza del Ayuntamiento acompañados por el tamboritero Rafael Bustos. Como lo hacen desde hace casi un siglo.
Una tradición que existe desde el año 1945 por iniciativa del alcalde de Ponferrada en aquella época, Adelino Pérez. Por aquel entonces, el regidor decide adquirir a cargo del erario 2 gigantes en Valencia e incorporarlos a las fiestas en honor a la Virgen de La Encina, al igual que se hacía en otras ciudades. Sin embargo, de Valencia solo trajeron las cabezas y las manos, por lo que el resto del cuerpo fue hecho con madera de la Comarca. Además, para introducirlos de manera efectiva en la tradición del Bierzo, se decide ponerles nombres bercianos como Isabel y Valerio.
Casi 80 años después el desfile de los Gigantes y Cabezudos sigue siendo tan grande y querido que la revista del programa de las Fiestas de La Encina 2023 ha querido rendir un homenaje a estos personajes de la mano de Diego Bello Fernández. Diego es un destacado gaitero, percusionista que también destaca en la flauta y el tambor. Diego es un enamorado de lo tradicional.
Volviendo a la historia de los Gigantes y Cabezudos, desde el año 1954, año en el que se emitió el primer programa de las fiestas, los Gigantes y Cabezudos han participado en todas y cada una de las Fiestas de La Encina, siendo un elemenento indispensable en la tradición berciana al igual que los sones de flauta y los golpes contra la piel del tambor que les acompañan.
A pesar de que la imagen que se tiene hoy en día de los Gigantes y Cabezudos es la de estar acompañados por flautas y tambores, no siempre fue así. Y es que en ocasiones la música corría a cargo de renombrados grupos de gaiteros tradicionales, entre ellos Os Montes de Lugo, Os Enxebres de Cacheiras y Os Follas Novas de Córgomo. Estos grupos forman parte una larga lista que dibuja la tradición berciana. Sin embargo, esto no significa que no hubiera ritmo berciano. Según fueron pasando los años, les llegó el turno a grupos locales de gaiteros como los Brisas del Sil u Os da Térmica para amenizar las Fiestas de La Encina a su paso por las calles de Ponferrada.
Una pieza también esencial de la tradición berciana es, sin duda, el tamboritero. Desde el inicio de los desfiles de Gigantes y Cabezudos se ha escogido para esta importante labor a los mejores. De entre los tamboriteros destaca "el Sapín" que a pesar de residir en Molinaseca había nacido en Villanueva de Valdueza. A "el Sapín", le siguieron otros como Domingo de Santo Tomás de las Ollas, Adelino Rodríguez de Santiago de Peñalba e Isaac Rodríguez de Espinoso de Compludo. Cabe destacar que todos ellos se trasladaron a Ponferrada dado que en aquellos años este papel tenía una relevancia mucho mayor que la que posee en la actualidad.