Torre del Bierzo y Fabero fueron los últimos municipios en claudicar, en ceder ante los envites que han golpeado a la minería del carbón desde hace décadas, pero antes fueron otros los que tuvieron que claudicar para llegar a este 4 de diciembre de 2018, el primer Día de Santa Bárbara sin minas ni mineros en la comarca del Bierzo. Tal vez este año no sea un día de celebración, pero si de reivindicación de un sector que sigue estando presente en las cuencas.
El cierre de Unión Minera del Norte (Uminsa) dejó sin actividad a la Gran Corta de Fabero y el pozo Salgueiro de Santa Cruz de Montes (Torre del Bierzo) hace menos de un mes, los últimos bastiones del carbón en una comarca que hace décadas contaba por decenas a las minas y chamizos y por miles a los mineros que trabajaban en ellas, mientras ahora lo que cuenta por miles son las personas que abandonan sus municipios mineros.
"Somos de los últimos de León que hemos acabado por claudicar", afirma la alcaldesa de Fabero, Paz Martínez Ramón, que reconoce que su municipio vive este día con una sensación extraña "mezcla de melancolía, angustia y desesperanza". Pero lo han celebrado como siempre, con la procesión de antorchas que lleva a la imagen de Santa Bárbara al Pozo Julia y "sin bajar los brazos". "Pero miramos al futuro con optimismo, no nos vamos a rendir, vamos a pelear y a luchar como hemos hecho siempre en Fabero", añade Martínez Ramón.
Así, lamenta que desde las administraciones se haya dado la espalda o no se preste atención a algunos de los proyectos vinculados al patrimonio minero que impulsa el Ayuntamiento de Fabero. "Es otra forma de explotar el carbón", afirma la alcaldesa, que exige una "apuesta real" por ayudar a los municipios mineros. "El patrimonio es fundamental, pero no es suficiente a compensar toda la pérdida de empleo que supone el cierre de la minería, necesitamos otros proyectos", apostilló.
En esta línea reivindicativa, el alcalde de Torre del Bierzo, Gabriel Folgado, también reclamó más ayuda de las administraciones públicas, mientras recuerda que siguen pendientes los convenios específicos para que los 'Fondos Miner' lleguen a los municipios. "Tenemos una sensación de abandono por parte de las instituciones, un poco olvidados y sin entender qué es eso de la transición justa", apuntó el alcalde, que no comprende que se dé de lado a unas cuencas que han aportando tanta riqueza al país.
Eso sí, defiende que Santa Barbará tiene que seguir siendo un día festivo, para olvidar por unas horas de la difícil situación que atraviesa el carbón y el municipios. "Siempre siendo optimistas con el futuro y luchar, reivindicarse y hacer cosas porque se pueda vivir dignamente en estos municipios y en el Bierzo", añadió Folgado, que confía en que "esta situación se revierta y que este Gobierno del PSOE haga realmente algo por poner fin a esta situación trágica".
Así, este martes la imagen de Santa Bárbara ha vuelto a las calles de los pueblos mineros y sus gentes han vuelto a entornar el Santa Bárbara bendita, como siempre, con la voz ahogada para pedirle, aún esperanzados, de que este no sea el fin definitivo del carbón en el Bierzo.