Este fármaco recibe el nombre de colchicina o colquicina y, según ha confirmado el equipo de investigadores de Montreal, para su correcta efectividad es necesario que el fármaco sea administrado en los pacientes enfermos de Covid-19 al incio de la enfermedad y siempre bajo prescripción médica.
El éxito de la colchicina radica en su carácter inmunosupresor, es decir, consigue prevenir y disminuir la inflamación provocada por el coronavirus en el sistema inmunológico de los pacientes contagiados, de tal forma que consigue frenar la famosa ‘tormenta de citoquinas’, consistente en una hiperreacción del sistema inmunitario que en algunos enfermos puede ser llegar a causar la muerte.
El estudio clínico realizado por el equipo de investigadores de Montreal ha contado con la participación de 4.488 pacientes, entre los cuales, todos aquellos que presentaban un diagnóstico probado de Covid-19, la colchicina logró reducir el número de hospitalizaciones en un 25 por ciento, la ventilación mecánica en un 50 por ciento y el número de muertes hasta en un 44 por ciento.
Según ha confirmado a través de un comunicado de prensa el director del Centro de Investigación del ICM-MHI, Jean-Claude Tardif, 'nuestro estudio muestra la eficacia del tratamiento de la colchicina, ya que, previene el fenómeno de la tormenta de citoquinas y reduce las complicaciones asociadas con la COVID-19'.
Por otra parte, otra de las ventajas por las que destaca la colchicina es por su reducido precio y fácil acceso. El precio del tratamiento de este fármaco para un mes de duración es de tan solo tres euros. Una ventaja que se suma a su facilidad de compra, ya que, se puede adquirir en cualquier establecimiento farmacéutico.
La colchina se suma a la efectividad de fármacos como el Aplidin de PharmaMar y constituye un gran descubrimiento científico ante el creciente avance de casos derivados de la pandemia del Covid-19, como el primer medicamento oral del mundo que puede ser utilizado para tratar pacientes no hospitalizados con COVID-19.