El alcalde de Cacabelos, el socialista Sergio Álvarez, declarará este próximo martes 14 de febrero en calidad de investigado por presuntos delitos de prevaricación y malversación de caudales públicos por mantener en el cargo a una interventora destituida en su día por la Consejería de Presidencia de la Junta de Castilla y León. El regidor y la propia interventora están citados a las 12,00 y las 12,30 horas, respectivamente, en el Juzgado número 1 de Ponferrada para responder al hilo de una denuncia presentada por el Partido Popular de Cacabelos.
El PP también se ha sumado al contencioso administrativo planteado por la propia Consejería de Presidencia y que sigue un proceso paralelo, según explicó este miércoles el portavoz municipal de los populares y exalcalde, Adolfo Canedo, quien inscribe precisamente en un supuesto intento de "tapar" esta noticia la rueda de prensa ofrecida el martes por el actual regidor, en la que se refirió a un procedimiento penal abierto contra su antecesor por, entre otras cosas, una serie de movimientos realizados sin justificar (pagos en su gran mayoría, dijo) y correspondientes al ejercicio de 2014. La denuncia contra la elaboración del plan director del Camino de Santiago, según explicó el popular, "se ha archivado" por parte de un Juzgado de Ponferrada.
El PP inscribe la reducción de la deuda en el cumplimiento del plan de ajuste
En su comparecencia de este miércoles, Canedo se defendió de estas acusaciones con el argumento de que la aprobación de la cuenta general del ejercicio 2014 sobrepasó en el tiempo su mandato, que concluyó a mediados del año 2015. Concretó, de hecho, que el actual Ejecutivo municipal no le dio el visto bueno hasta un año después.
El popular también matizó las afirmaciones realizadas por su sucesor, que presumió de haber reducido la deuda en 1,6 millones de euros durante el primer año y medio de gestión. Canedo inscribió este descenso "en el cumplimiento" del plan de ajuste aprobado durante su etapa como regidor. Y se congratuló de que Álvarez "reconociera que la deuda superaba los 7 millones de euros en el momento del relevo municipal. "Ellos lo negaban entonces. Nos alegra que ahora lo reconozcan", dijo.
Canedo reiteró que se encontró a su llegada a la Alcaldía en junio de 2011 con una deuda que sobrepasaba los 13 millones, datos que no coinciden con lo afirmado por el actual alcalde, que habla de una deuda contable de 2,8 millones de euros en aquel momento. El popular asegura que el socialista no incluye fondos que no entraban en la contabilidad como las deudas a la Seguridad Social o a Gas Natural Fenosa, préstamos de Caja España o devolución de subvenciones pendientes.
Precisamente en este último apartado, Canedo considera "un insulto" que el alcalde intentara el martes responsabilizar a su grupo de la devolución de la subvención por la construcción del Recinto Ferial. "Se critica al que denuncia y no al que cometió el delito", señaló para arremeter de nuevo contra las "consecuencias" de la gestión del Gobierno presidido por el socialista José Manuel Sánchez.