El origen del Bierzo espera la primavera con las zarzas casi amarrando sus piedras para evitar el desplome de más mampostería de la muralla. Tras la inversión de 200.000 euros en la compra de terrenos interiores ya en 2011, el CSIC todavía no ha presentado ni un plan director para su recuperación.
Restos de la primera cata arqueológica hace más de una década
El origen de Bérgidum fue una ciudad prerromana, donde diversos estudios ubican el escenario de la primera gran batalla de las guerras de Roma contra Cántabros y Astures.
Ahora la guerra es contra el olvido, el viento y los azotes del tiempo, que van raspando esa piel original de Bierzo.
Esta joya histórica fue declarada Monumento Nacional en 1931 pero tras una intervención de consolidación de los muros hace una década, actualmente la muralla se encuentra asaltada por la maleza y en varios puntos es perceptible comprobar cómo la mampostería de la muralla va descomponiéndose con desprendimientos. Es simbólico casi que los puntos para colocar focos instalados hace cinco años, sigan sin dar luz a la muralla, carentes de la instalación o desmantelados.
En 2011 el consorcio para Castro Ventosa que conforman Villafranca y Cacabelos, culminó la compra de terrenos a particulares por valor de 200.000 euros subvencionados por fondos europeos. Después de este paso, deberían haberse cedido al Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) previa elaboración de un plan director que la institución científica sigue en elaborar para las prospecciones intramuros dando continuidad a las realizadas a comienzos de este siglo, y nuevas actuaciones de consolidación de la muralla.
Viñas en el interior del castro con la caseta para el guardia